Por: Julio Mejía
Los dos poemas presentados a continuación son fragmentos del libro titulado Balón de oro, escrito por Julio Mejía III y publicado por la editorial Atrasalante en febrero del año en curso.
Julio Mejía III (1990) es docente en la Universidad de Monterrey (UDEM), en donde ha dado, entre otros, el curso de Taller de Creación Literaria: Poesía. Coordina también el Taller de Creación Literaria de Difusión Cultural UDEM y fue becario del Centro de Escritores de Nuevo León en 2016, donde comenzó con la escritura de Balón de Oro.
Pelé narra comerciales para Pfizer
mi báculo, más corvo y menos fuerte
Francisco Quevedo
El estadio vacío.
Un hombre abandonado en la cancha.
Los reflectores apagados.
El eco silencioso de los hinchas ausentes.
La línea de banda desdibujada.
El banderín de córner removido.
La portería lejana e imposible.
Cuando no pueda meter
ni un penal
ni un autogol,
consulte a su médico:
yo lo haría.
El juego del hombre
Veintidós hombres en pantalones cortos
corren tras una pelota
con un objetivo en mente:
ese momento de emoción intensa
en el que todo puede suceder:
el abrazo grupal
el pellizcón de nalga
el beso fortuito.
Para no ser un deporte de contacto,
los jugadores parecen demasiado ansiosos
de cometer faltas.
Del otro lado de la cancha
o del radio
o de la pantalla chica,
millones de hombres les prestan más atención
que a sus esposas:
un gol se traduce en más satisfacciones
o reclamos
sólo en la derrota de su equipo
puede el hombre llorar
sin menoscabo de su honra.
A veces tengo la ligera sospecha
que más que un juego
el futbol tan sólo es una viril excusa.